jueves, enero 25, 2007

De lo confuso que resulta una confesión de ese tipo en mi persona, la magnitud que tiene dedicar una canción(...Te diré te diré, No quiero estar sin ti quédate quédate, Tu camino termina aquí....)

El hacer un juego de continuación, con pequeñas estrofas con otra canción, otra qué sin saberlo el y si n decirlo yo ya era su canción.

Como controlar ese sentimiento que ya no tendría que existir, que ya no es el mejor momento para manifestarlo, que hermoso y con tanta historia y al final es bobo, es infantil pero ha madurado, es algo que nadie mas entendería, qué nadie mas tiene ni vive, es algo que como se lo dije a el no se explicarlo, solo se que me tiene llena de sonrisas y empapada en lagrimas, con mariposas en el estomago y el corazón palpitando, con la cabeza hundida de recuerdos y confundida pues este ya no es nuestro momento o quizás aun (de nuevo) no es nuestro momento.......


...cuanto tiempo ha pasado desde los primeros errores
del interrogante en tu mirada
la ciudad gritaba maldecía nuestros nombres
jóvenes promesas no no teníamos nada.....

...agárrate de mi mano tengo miedo del futuro
y detrás de cada huída estabas tú
estabas tú....

...y ahora que te encuentro
veo que aún arde la llama que encendiste
nunca nunca es tarde para nacer de nuevo para amarte
debo decirte algo antes de que te bajes de este sucio vagón
y quede muerto mirarte a los ojos
y tal vez recordarte que antes de rendirnos
fuimos eternos .....



1 comentario:

Anónimo dijo...

Nunca es tarde para dejar ciegos a los lectores con letra roja.