domingo, enero 15, 2012

España me sigue llamando…
Aun cuando el intento del verano quedo en eso, un intento… aun cuando dicen la cosa en España está muy jodida ahorita, hay algo que noche a noche me busca, me canta. Me canta Drexler, me canta Sabina y me canta Serrano y mas lo vuelvo a pensar.
No sé si esto es una crisis de incomodidad con lo actual, pero me la paso pensando entre Barcelona, el DF y la americana.
No, no es una huida es darle un orden a esto que me sale del corazón y de las ganas y que aquí sólo la estoy sobrellevando, no estoy mal, pero no estoy bien… no me siento brillar de felicidad, ni con mi trabajo ni con mi manera de llevar esto que le llaman vida.
Me hace falta esa emoción y esa pasión por hacer las cosas, por la vida…

Y es que no me quiero quedar así, semi gris, semi opca…yo me he visto brillar de felicidad y aun cuando todos ustedes me vean tan bien y tan bonita como dicen que últimamente estoy, a mi me falta más. Y no estoy ni segura de qué es.

sábado, enero 07, 2012

Hace 10 años que volví….volví siendo suya como de nadie más.
El DF como testigo y como dueño de nuestro sueño guajiro y nuestra esperanza de un tu y yo aún en estos tiempos…. Estos tiempos de mensajes obscenos y cariñosos a distancia, de charlas sexuales y consejos de vida…. ahora que somos más que amigos y que estamos más que lejos.

Ahora que no concibo mi vida sin él en algún momento.

Tenía 3 o 4 años cuando lo elegí como el mejor, el mejor entre los demás. Nos hicimos novios de kínder, eso debe ser mucho, incluso más que ahora.

Tenía 14 años cuando descubrí lo loca que te puede poner un hombre aún sin saber por qué.

Tenía 16 cuando supe que era despedirte de lo único cercano que has tenido a enamorarte, de la buena y la ñoña manera.

Tenía 19 cuando aprendí que por una pasión, uno hace lo que sea. La mentira mas grande, la locura menos pensable…

21 Cuando entendí que él era para mí y me aterre como nunca en mi vida.

24 Cuando me rompió el corazón la idea de saberlo tan hombre como los demás, tan de otra persona, tan capaz de ocultar algo tan grande, tan carbón como para tenerla en la cama y llamarme desde la otra recamara.

Tenía 27 y me entregue, a todo y sin nada.

Estoy a punto de los 30 y aun pienso en el hace 10 años, lo habría cambiado todo…. Si ese 8 de enero no hubiera regresado, con los ojos ahogados de llanto, con los pájaros en la cabeza, con el corazón en el Distrito Federal, con las manos vacías y sin saber a que regresar.
Si tan solo el miedo, el miedo a no sé qué no me hubiera invadido.
Hoy sería otra historia; No sé que tanto hubiera hecho y que tanto no. No me arrepiento nada, nada de lo que hice, pero aún 10 años después daría lo que fuera por tener esa oportunidad, una vez más. Pero en este tiempo y con todo lo que lleva de por medio.


Sucede que me di cuenta del tiempo y 10 años suenan demasiados y no se sienten tanto. Bien raro.