miércoles, noviembre 06, 2013

La vida después de los 30

Cuando más joven nunca pude verme después de los 30. Incluso pensaba moriría joven, más de una vez lo dije y a más de una persona. Tenía un novio que me regañaba por pensar en eso y me cuestionaba sí dejaría a nuestros hijos huérfanos... Y yo insistía, yo no creo que viva más de los 30 o 32, sería y sinceramente lo pensaba. 
Hoy en plena clase (con el tema de la muerte y el renacimiento) volvió esta idea en mi cabeza, hoy pienso distinto. Creo que aunque físicamente no morí o no he muerto a mis 31 años, hay una muerte simbólica. Estos 31 años me han cambiado la vida completamente y hay una Dennise de antes y una ahora y no sé por cuanto más. He crecido mucho y tomado decisiones de vida grandes. Cambie de espiritualidad, cambie de hábitos, cambie de giro laboral y ahora me siento tan bien, tan libre de ser, de hacer, de sentir, de decidir, de decir, de omitir.... Libre completamente y con todo el deseo de amar, de amar bien y amar bonito. 
Entonces pienso, quizá sí de murió o estoy acompañando en su muerte todo esto que yo era y ahora no. Quizá este es un bardo de un año. 

No hay comentarios.: